La postura de Apple sobre el derecho a reparar se ha vuelto más flexible, ya que ahora la empresa apoya el uso de piezas usadas para las reparaciones del iPhone 15, que pueden incluir la cámara, la pantalla y la batería. Componentes que no requerían 'configuración', según informa TechCrunch, ya funcionaban de manera similar.
Aunque el movimiento de Apple es bienvenido por muchos, responde a una serie de preguntas: ¿Si se rompe tu iPhone, deberías tener derecho a arreglarlo? ¿Si quieres arreglar tu iPhone, deberías poder hacerlo tú mismo o verse obligado a acudir al fabricante? Y si vas a arreglar tu iPhone por tu cuenta, ¿o pagar a un tercero para que te ayude, deberías poder usar las piezas que funcionen? La respuesta a estas preguntas es cada vez más afirmativa.
Han quedado atrás los días en los que arreglar algo que compraste era posible con una llave inglesa y algo de determinación. La electrónica moderna es increíblemente compleja y a menudo se construye de tal manera que evita ciertos elementos de elección del consumidor. Por lo tanto, la reparación se ha vuelto más difícil y, por lo tanto, más fácil de controlar. Que los consumidores tengan más autoridad sobre la reparación de sus iPhones, independientemente de lo que sea y quién lo construyó, desplaza parte de la gravedad del control al comprador sobre el fabricante, lo cual muchos aplaudirán.
Apple respondió vehementemente a las críticas sobre la emparejamiento de piezas y recientemente ha respaldado leyes en varios estados que consagran las opciones de reparación del consumidor. Independientemente de cómo veas la postura anterior de Apple y si era discordante con su postura actual, parece que el impulso ha cambiado en el mercado hacia una mayor elección y control del consumidor. Viva los propietarios de dispositivos.